El lactitol es un polialcohol muy utilizado por la industria alimentaria como edulcorante artificial (E966).

Gracias a su poder endulzante, junto a su excelente palatabilidad, se utiliza es productos alimentarios como, por ejemplo, los refrescos, dulces, etc. Incluso, es una molécula orgánica tan estable que se puede utilizar en productos alimentarios que necesitan para su elaboración temperaturas elevadas, como es el caso de la repostería.

Al igual que otros edulcorantes polialcohólicos utilizados en la alimentación, como el maltitol, el sorbitol, el xilitol, el manitol y el eritritrol, el lactitol reemplaza a los azúcares en algunos alimentos bajos en calorías, por lo que su presencia ayuda a evitar un aumento de niveles de glucosa en sangre y previene la formación de caries.

Desde el punto de vista químico, su estructura consiste en un derivado disacárido formado por la unión de dos unidas más simples de azúcares como la galactosa y el sorbitol.

Además de utilizarse como edulcorante, ¿para qué sirve el Lactitol?

Además de su poder endulzante, el lactitol tiene efectos laxantes, es un compuesto que no es hidrolizado por las enzimas intestinales (disacaridasas) presentes en el intestino delgado (enzimas encargadas de romper los disacáridos en sus unidades más pequeñas como las glucosas, fructosa, etc.) por lo que dicho compuesto orgánico llega intacto al colon.

En el intestino grueso es donde el lactitol es metabolizado por la flora intestinal en ácido acético, ácido propiónico y ácido butírico. Dichos ácidos orgánicos de cadena corta incrementan la presión osmótica en el colon, aumentando el contenido en agua de las heces y el volumen fecal, responsable del efecto laxante.

Por ese motivo, recientemente, ha sido aprobado por la FDA como laxante osmótico para tratar estreñimiento ocasionado por causas psicológicas, psicosomáticas o neurológicas, como sucede en el estreñimiento idiopático crónico o estreñimiento funcional.

Este polialcohol está disponible como polvo cristalino o solución incolora. En Europa, desde el 2017, el lactitol es uno de los nuevos ingredientes alimentarios autorizados para la elaboración de complementos alimenticios destinados a la población adulta, tal como se definen en la Directiva 2002/46/CE (en forma de cápsulas, comprimidos o polvo). Eso quiere decir que todos aquellos complementos alimenticios que lo contengan y se comercialicen para ese fin, deben indicar en su etiquetado la denominación “lactitol”.

El contenido máximo de lactitol es de 20 gramos al día. (Reglamento de Ejecución (UE) 2018/1293 de la Comisión, de 26 de septiembre de 2018, por el que se modifica el Reglamento de Ejecución (UE) 2017/2470, en lo que se refiere a las condiciones de uso del nuevo alimento lactitol)

Además, aquellos productos para adultos que contengan dicho polialcohol solo pueden declarar en el etiquetado que El lactitol contribuye al funcionamiento normal del intestino al aumentar la frecuencia de las deposiciones siempre y cuando, dicho complemento alimenticio contenga como mínimo 10 gramos de lactitol por porción diaria. Eso es debido a que a dosis superiores a 10 gramos al día está científicamente comprobado que se obtiene el efecto beneficioso declarado.

¿En qué alimentos se encuentra el lactitol?

Este tipo edulcorante se suele encontrar en los helados, en las galletas, en bebidas carbonatadas, en chocolates, etc. En definitiva, en todos aquellos alimentos que hayan sustituido el azúcar por edulcorantes alimentarios. Vamos, las versiones menos calóricas de esos productos, es decir, normalmente las que indican «sin azúcares añadidos».

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¿De dónde se obtiene el lactitol?

El lactitol se obtiene de forma sintética por hidrogenación catalítica (se utiliza níquel como catalizador) de la lactosa, el principal azúcar de origen natural presente en la leche materna de los mamíferos.

Como recordarán del artículo donde explicaba cómo se elaboraba la leche sin lactosa, la Lactosa es un disacárido formado por la unión de dos unidades más simples de glúcidos: la galactosa y la glucosa. Esas dos unidades más simples de azúcares se pueden modificar de forma sintética de la siguiente manera.

En el caso concreto de la Lactosa, si sometemos a dicha molécula orgánica a procesos químicos (muy habituales en la industria química) como la hidrogenación catalizada con Níquel, uno de los azúcares de la molécula se puede romper y convertirse en sorbitol. La unión de una galactosa y un sorbito es el conocido aditivo alimentario llamado lactitol.

En resumen, el lactitol es un polialcohol seguro y aprobado como aditivo alimentario. En casos puntuales puede provocar gases, diarrea e incluso calambres, pero no es lo habitual.

 ¿Habías escuchado hablar del Lactitol?

¿Cuál es la diferencia entre lactitol y lactulosa?

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Creación, Redacción y Edición del Vídeo: Mónica Blanco

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